***


Tú enciende el sol. Tú tiñe el mar, y tú descorre el velo que oscurece el cielo, y tú ve a blanquear la espuma y la nube, la nieve y la lana, y tú conmigo a cantar la mañana. Tú a dibujar el trigo y la flor. Tú haces de viento, dales movimiento y tú les das color. Tú amasa los montes. Tú, al pozo a baldear y tú conmigo y el gallo a cantar...Que hay que empezar un día más. Tire pa'lante que empujan atrás. Y póngase el calcetín, paloma mía, y véngase a cocinar el nuevo día.
Todo esta listo, el agua, el sol y el barro, pero si falta usted no habrá milagro.


***

.

miércoles, 20 de octubre de 2010

.

Quizás el momento justo exacto preciso aún a tiempo

Para que el río no se apagara con alguna braza

Para perder todas las llaves de todas las puertas

Para que manos en espaldas echaran cuantas pesadillas.

Tuvo que llover desde el techo para adentro

Hubo que pensar en lo imposible

Y empezar a empezar:

.

Hola, lindo.

.

des/variaciones

Ok, podés escribir solo cuando tenés un estado psíquico alterado: un ovillo de nervios en la panza o un fantasma de humo en la cabeza o un kilo de vino en los ríos sangrientos o un litro de papas en la garganta o sencillamente un sueño que podría ganar la mejor representación de cabeceadas de un viaje en colectivo.

Y eso, no te pasa eso con el sueño, ¿no? Digo, podés soñar en cualquier lado. Podés perfectamente confundirte lo-que-es-sueño de lo-que-no-es-sueño. Y quién te dice, te quitan todo de un pellizco. O te lo resuelven. De última a quién le va a importar qué sueñes más que a tres o cuatro otras psíquis en el mundo entero.

¿Cómo puede costar decir algo sobre lo que se piensa todo el tiempo? ¿Cómo pueden estar estas manos-lengua-boca-ojos-nariz tan desconectados de estas sí-la-bas? ¿Se habrán cansado de estar dolorosamente cosidas una a otras tantos tiempos? ¿Nos habremos desviado del parámetro de lo que considerábamos una normalidad?